BARRIOS DE PIE VENADO TUERTO

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miércoles, 18 de agosto de 2010

Cambiar la Historia es posible y tarea de la Política Pública


Estamos por estos días recordando a San Martín, un hombre cuyo pensamiento y accionar jamás dejaron de lado sus convicciones por honores, ni por dinero.
Juana Azurduy, quien defendía la frontera norte para que él pudiera liberar a la Patria Grande Latinoamericana, perdió a su marido, a sus 4 hijas/os y dio a luz a la quinta en pleno combate. Siendo de una familia acomodada, eligió el valor de la independencia; perdiendo todos sus bienes materiales y sus afectos más cercanos. Fue enterrada un 25 de mayo, en una fosa común sin acompañamientos, ni honores. ¿No es hora de que aprendamos algo de ellos?.
Porque lo que hizo Roca no pasó, nos pasa hoy; ya que todavía seguimos honrando a un hombre que desde el Estado, como Ministro y Presidente, asesinó, torturó a todo un pueblo para apropiarse de sus tierras, tratando de esclavizarlo, humillando su cultura, intentando borrar nuestras raíces. Es hoy cuando seguimos destacando a aquel señor en el espacio “público” de una calle, que es de todos/as los/as venadenses.
Es en este presente, cuando quienes se oponen al cambio, esgrimen argumentos económicos y comerciales, pero en vez de proponerle al Estado que los/as ayude a pagar aquello que no pueden, prefieren defender el nombre de la calle, dejar las cosas como están. ¡Qué importa lo que hizo Roca!. No se puede cambiar la historia –dicen.
Nos preguntamos ¿importa lo que hacemos hoy nosotros/as en nuestra comunidad?. Porque no se mejora la calidad de vida de todos y todas “olvidando lo malo que pasó” sino recordándolo, para modificarlo y no repetirlo.
En barriadas más humildes que el centro, se cambiaron los nombres de calle Inglaterra por 2 de Abril, EEUU por Pte. Perón y John Kennedy por Eva Duarte de Perón.¿ No había allí comercios y vecinos/as “perjudicados”?.
Quienes viven en una calle no son sus dueños/as, sino que todos/as los/as vecinos/as lo somos, por eso son espacios públicos, ergo de la comunidad. ¿Qué común identidad deseamos construir?.¿En qué espejo deseamos mirarnos y que se miren nuestros/as niños/as?.¿En el de Roca o en el de Juana?, ¿en el de Colón o Tupac Amaru?.
Por eso no se trata de que le coloquen el nombre de Juana a una calle sin nombre, se trata de CAMBIAR LA HISTORIA, de dejar de reconocer a genocidas como si fuesen próceres y honrar a quien verdaderamente lo fueron para todos/as y no para una élite dominante.
Los/as representantes de instituciones y organizaciones gubernamentales y no gubernamentales deberían defender, después de casi 27 años de democracia, valores más importantes que los mercantiles; deberían entender que la Dignidad, la Memoria, la Verdad y la Justicia, están por encima de los privilegios de un sector.
Las elecciones que hacemos hoy, construyen o destruyen Derechos. Todas las violencias están relacionadas, por lo que si una sociedad reconoce como prócer a un ser tan profundamente violento como Roca; cómo luego no va a avalar la violencia de un hombre contra una mujer, o de un adulto/a contra un/a niño/a.
La violencia que proviene del Estado es la peor de todas, porque legitima las cotidianas y construye una comunidad violenta, de la cual todos/as “nos quejamos”, pero no estamos dispuestos/as a hacer ni lo mínimo para modificarla.
Cambiar la historia por una más justa, conlleva ciertas “molestias”, pero al final lo que queda es un legado de DIGNIDAD para nuestros/as hijos/as y una sociedad orgullosa de no defender a genocidas como si fuesen próceres.
Es hora de que la política pública, de cuenta de ello. Después de todo de eso se trata la construcción de ciudadanía.

Respetuosas de todas las opiniones, pero por sobre todo en Defensa de los DERECHOS de todos y todas.
Las Juanas

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